ALGUNAS REFLEXIONES SOBRE LA VIDA EN PAREJA EN ESTE MUNDO DE HOY…
Ana Giorgana
Terapeuta
Coach en temas de calidad de vida emocional
Los seres humanos somos personas primordialmente emocionales. Todo lo que vivimos nos desencadena algún sentimiento o emoción. Los recuerdos, los pensamientos, los lugares a los que asistimos, la actividad que realizamos, etcétera.
Estar atentos a las emociones que experimentamos es una manera de vivir en contacto con nosotros mismos. Si las dejamos de largo se convierten en un remolino que no logramos identificar y enfermamos físicamente, también del alma.
Cuando la vida se experimenta desde ese lugar de sentirnos atropellados por la emocionalidad, quiere decir, que estamos distraídos y que no captamos las señales que nuestra experiencia nos está enviando para dar una solución a nuestros problemas, conflictos o relaciones.
Existen momentos en el transitar de la existencia, que por su naturaleza, nos aporrean, parecen más fuertes que nosotros mismos. Y es precisamente en esos momentos cuando tenemos que poner un alto en el camino.
Detenernos a pensar, a reflexionar y dejar de reaccionar cobrándole a todos los que están cerca de nosotros las frustraciones, los desencantos y por supuesto, la gran inestabilidad interna.
Nadie es responsable y si quieres salir de estas situaciones dolorosas necesitas:
1.- Identificar que nos está pasando.
2.- Conocer nuestros sentimientos.
3.- Reconocer que necesitamos un cambio.
4.- Comprender cuáles son los patrones y relaciones dañinos en nuestra vida.
5.- Saber y tener el coraje de salir de nuestra circunstancia de vida si es que no es la que deseamos.
6.- Acudir a una psicoterapia.
7.- Tomar la propiedad de nuestra vida.
8.- Aceptar que estamos en crisis.
9.- Dejar partir el ayer.
Y cobrar conciencia que solo en el HOY podemos sanar un pasado lleno de turbulencias emocionales.
Gracias como siempre por ser parte de Cecreto
Cerrar ciclos, dejar ayeres y transformar el hoy como la oportunidad de transitar hacia un camino hacia la libertad emocional.
“Cerrando ciclos y etapas en la vida es una condición para sanar el presente y un camino hacia la libertad”
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