Nos damos a la tarea de tapar, enmendar y además,
lo vivimos como válido.
Historias Reales de Persona Reales
El amor es ciego es un dicho popular que tiene que ver con
nuestra ceguera en la vida amorosa.
Abrir los ojos en la relación de pareja no es fácil.
La ceguera es una condición del enamoramiento.
El amor es ciego porque cuando nos enamoramos no se
logran ver los defectos, las señales y cualidades del
otro, en su justa dimensión.
La percepción de la pareja está nublada, la pareja se ve
con los lentes de la vida amorosa y todo lo que implica
en términos fisiológicos, psicológicos y conductuales.
Estamos ciegos por el amor y todo lo que nos hace sentir,
no por la persona misma.
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Nos volvemos invidentes frente a lo que el otro es
realmente.
El problema no es nuestra pareja, sino nuestra ceguera.
No somos capaces de vernos a nosotros mismos y
reconocer que somos invidentes para ver al otro,
y para nosotros mismos, también.
Cuando el amor cuenta con ceguera,
nadie puede ayudarnos.
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Pensamos y creemos que nuestro amor hará desaparecer
por arte de magia, aquellos malos tratos, aquellos
malos ratos y también aquellos sufrimientos
de nuestra vida en pareja.
El amor es ciego, pero solo a nuestra mirada, para el
resto de las personas, pareciera que todo es muy claro.
Nos dicen, nos previenen, nos dan consejos,
pero lo vivimos como una agresión.
Ellos, los otros, los familiares y amigos no se dan cuenta
de nuestro gran amor,de nuestra comprensión
y de nuestra vida de a dos tan maravillosa, pero que,
está llena de antifaces, de un velo que nadie puede ver
sólo nosotros conocemos, podemos, al menos,
por el momento, porque nuestros lentes del amor,
no nos lo permiten.
Ana Giorgana
Y Prevención Familiar y Social
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