Historias Reales de Personas Reales...
Me enamoré. La relación duró cinco años. Vivimos juntos todo ese tiempo. No fue una luna de miel.
Pero sí una relación muy divertida. Yo la amo y no me siento desesperado ahora que todo terminó.
Terminó con una tontería. Me dijo que Yo nunca le daba toda la atención que necesitaba.
Pero si desde que estamos en pareja solo tengo ojos y oídos para ella y para nuestra relación.
Yo en verdad la quiero.
Estoy muy desesperado.
Me siento solo.
Tengo un gran vacío.
Tampoco tengo un espacio propio, ella se quedó en la casa y yo salí de ahí.
Estoy desolado, triste.
Me despierto todas las noches con una gran ansiedad y una sensación de soledad.
Tengo miedo.
Necesito ayuda pero no se por dónde empezar.
Quiero huír.
Pero esta vez, y en esta ocasión, no he vuelto a hacer lo mismo: no regresé y dejé de buscarla.
Mejor pedí ayuda y la encontré en este lugar.
La forma en que me dijo que me fuera fue humillante.
No es la primera vez, pero Yo siempre regresaba a pedir perdón y disculpas.
Mariano en esta historia muestra su humanidad y su ser vulnerable.
Sabe que está en lo correcto, y sin embargo, está en pleno proceso de duelo y de pérdida.
Siente que su vida ha sido un verdadero fracaso.
No sabe cómo reponerse.
La situación de esta ruptura ha sido difícil sobre todo porque existen elementos importantes que se juegan en la separación.
Ese sentimiento de humillación lo cuál nos refiere una herida infantil importante.
En mi libro Cómo recuperar la confianza en el amor hablo sobre esas heridas tan profundas que se ponen de manifiesto en las relaciones de pareja, como son:
- humillación y traición.
- abandono.
- desamor.
- infidelidad y celos.
No te lo puedes perder, todos los detalles están disponibles en esta dirección.
www.cecreto.com
Ana Giorgana
Coach de vida y terapeuta