No puedo creer que me hayas hecho est a mí.
Tan es posible, que lo hizo.
Así una gran cantidad de quejas llegan a la consulta con los ánimos de la indignación.
Pero sí dijo que me amaba, y ahora, resulta que ya no le interesa la relación.
Me juró fidelidad eterna y de todos modos ahora descubro que ha sido infiel en varias ocasiones.
Me dijo que Yo era lo más importante en su vida, pero no puede desprenderse de su familia y a mí nunca me da mi lugar.
Me prometió que nuestro proyecto sería para toda la vida, y ahora, me ha dicho que ya no me quiere y que prefiere terminar.
Palabras más o palabras menos son las consultas recurrentes cuando se activa la herida de traición.
Las personas cambian, los sentimientos también, la vida en pareja, por supuesto, que se modifica con el tiempo, con lo cotidiano, con los años, con las experiencias de vida.
Necesitamos transformar nuestro amor en una nueva versión en cada ciclo de la pareja y en cada etapa de la misma.
Pero sí lo sucedido en tu pareja no tiene solución y se ha perdido el respeto, el valor y la condición personal, no queda más remedio que proponer un tiempo, una solución, o tal vez, la ruptura definitiva.
En mi libro sobre Cómo Recuperar la Confianza en el amor, hablo sobre los riesgos del amor en pareja, uno de ellos, la traición.
Ana Giorgana
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