Uno de los temas que más llega a la consulta en mi especialidad, es el de la Relación de Pareja.
Te comparto un artículo sobre cómo las parejas tienen dificultades porque sus realidades y formas de ver el mundo son diferentes.
Todo ser humano cuenta con un
conocimiento del mundo mediante la percepción. Todos percibimos de manera
diferente e interpretamos la realidad de acuerdo a nuestras experiencias de
vida.
La pareja no es una excepción.
Cada uno de ellos, llega a la relación de pareja con su propia historia de vida
y experiencias interpretadas.
Ser hombre o ser mujer nos habla de una forma distinta de
apropiarnos de la realidad. Hombres y mujeres no vemos el mundo de la misma
manera. Biológicamente somos diferentes, físicamente también.
Las mujeres estamos dotadas de la
capacidad de procreación, este solo hecho marca una diferencia sustancial en la
vida y en el mundo. El sexo en sí ya marca pautas distintas de ver el mundo.
Además, de las experiencias personales al nacer, la familia, las capacidades.
En las relaciones de pareja, la
imposición de la realidad propia genera problemas de entendimiento y
comunicación:
1.- Hombres y mujeres no perciben
la relación de pareja de la misma manera.
2.- Hombres y mujeres no esperan
lo mismo de una relación de pareja.
3.- Hombres y mujeres creen que
saben cómo tiene que ser una pareja y de ahí, norman el criterio para
relacionarse con su pareja.
La historia de cada miembro de la
pareja:
1.- Modelos de pareja aprendidos.
2.- Modelos de ser hombre o mujer
en una relación de pareja.
Las parejas insisten en imponer
esos modelos. Es importante entender que no son la misma pareja, sino que
tienen que construir su propio modelo, porque son personas diferentes a sus
padres.
Inicio de los conflictos:
1.- La vida en pareja no es lo
que deseábamos.
2.- Las expectativas en:
·
El sexo.
·
Los tiempos.
·
Los proyectos.
La realidad compartida:
- Un nuevo proyecto de vida.
- Preguntar qué queremos como pareja en todas las áreas.
- Necesidades de la pareja y de cada uno de los integrantes.
- La pareja no es un satisfactor de TODAS las necesidades.
-
La pareja solo puede cubrir lo que puede cubrir.
Cada persona es responsable de
generar su propio bienestar o malestar: su Reino de los Cielos o su propio
infierno.
Toda persona con pareja o sin
ella debe realizar un compromiso para comprender que es el único que puede resolver
su propia circunstancia de vida. Por tanto, la vida en pareja es una realidad
compartida.
Probablemente nadie nos enseña a
realizar un proyecto de vida personal y de pareja.
Ana Giorgana
Especialista en Terapia de Pareja
Y Prevención Familiar y Social