Querer controlar significa que las cosas y situaciones tienen que ocurrir de acuerdo a mis expectativas y formas de ver la vida y entender el amor.
Querer controlar el amor implica no respetar la vida de los demás y necesitar que su vida sea un reflejo de mi propia existencia y deseos.
Querer controlar el amor no es ver a los demás sino correr desesperado por la vida para que nada escape de mi manera de ser.
Ana Giorgana