Historias Reales de Personas Reales...
Los lamentos, los quebrantos y los dolores son una constante en la vida de las parejas. La queja constante y permanente:
"No soy feliz"
"No me quiere como yo necesito"
"Otra vez me mintió".
"No puedo dejar de amarlo"
"Me cuesta trabajo vivir sin ella"
"Yo se que no me conviene pero no lo puedo evitar"
Cuando las personas no asumen su posición de elección y libertad de establecer relaciones más constructivas primero consigo mismas y después con sus parejas vivirán constantemente en el dolor y la queja.
Quejándose de una vida miserable sin lograr dar el paso de la autonomía hacia una vida más placentera con esa pareja o sin ella.
Existen personas que buscan siempre y en todo momento un muro de lamentaciones y no una forma de encontrar diversas alternativas para contar con una mejor calidad de vida.
Evidentemente, se requiere coraje, un gran amor propio y la renuncia al sufrimiento al dolor crónico.
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