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La forma y manera en la que una
pareja establece en torno al dinero es una situación emocional y de poder. Por
más amor que le pongamos al asunto. El dinero es el dinero y también
necesitamos aprender hablar y tratar ese tema.
Aún cuando pareciera un aspecto
menor, el manejo del dinero en la pareja es un tema delicado y complejo y más
cuando los dos aportan. Cuando solo es el hombre quien da dinero a la casa,
queda perfectamente claro hacia donde se inclina la balanza o viceversa,
existen relaciones en las que las mujeres son el sustento y también se
establecen cotos de poder al respecto.
El ingreso independientemente de
quién lo genere o si son ambos debe cubrir las necesidades "todas de la
pareja", y en su caso, de la familia, cuando existen hijos.
El dinero es el vehículo que
permite consolidar los deseos, las ganas y contar con el orgullo de aportarlo a
la sociedad conyugal o de pareja. Sin embargo, existen desequilibrios
importantes. Quién aporta más se siente con el derecho de decidir cómo, cuándo
y dónde deberá destinarse ese recurso.
Si lo vemos fríamente la relación
de pareja es un contrato. Y por tanto, todos los miembros que integran esa
sociedad tienen que estar de acuerdo. El problema son los sentimientos, el
proyecto de vida y el amor.
Por medio del dinero expresamos
nuestros deseos, nuestros anhelos de comprometernos y nuestra necesidad de
venganza y de justicia.
Los fantasmas alrededor de la
economía en una pareja siempre rondan y están presentes. Las mujeres, por lo
general, se encuentran en desventaja, si no generan su propio ingreso. Sobre
todo en relaciones que no están dispuestas a modificar los términos del
machismo y la equidad y de los roles tradicionalmente establecidos.
Por ello digo tradicionalmente.
Pero esa ya no es una realidad. Hoy en día los roles han cambiado drásticamente
y por tanto, las formas de entrada económica a los hogares también.
Tocar temas económicos es una
situación compleja que involucra los sentimientos. Necesitamos tocar el tema y
enfrentarlo por doloroso o conflictivo que pueda parecer.
Muchos hombres y mujeres utilizan
el dinero, el ingreso y su distribución como una forma de control, de vergüenza
o de humillación. Cuando esto sucede se está poniendo el acento en el poder, en
el control y en relaciones de inequidad.
Algunas mujeres, por ejemplo,
piden permiso para gastar más, comprarse unos zapatos o algún arreglo para la
casa. Es que no tienen la libertad del amor y de la economía.
Por tanto, es necesario hablar
del dinero, exponer el tema, las necesidades y la realidad.
Dejemos de ver al dinero como un
tema emocional sino que tenemos que traerlo q nuestra vida como una realidad
presente en nuestra vida de pareja.
Y así plantearnos preguntas como:
- En qué vamos a invertir?
- Cuál es nuestra proyección
económica como pareja?
- En qué tipo de escuelas
queremos que nuestros hijos vayan?
El tema del dinero como muchos,
son un aspecto del proyecto de vida en pareja.
En Cecreto contamos
con todas las herramientas para hablar de un proyecto de tal importancia.
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Mandamientos de la vida en pareja.
Mi misión
es la calidad de vida emocional y su impacto en lo social.
