Eleazar realmente es un hombre muy inestable. Parece un niño en sus relaciones amorosas. Un día quiere estar con la persona a la que ama, al otro se siente invadido, después rompe la relación, para llegar a la siguiente semana con que mejor sí desea estar en una relación.
Elisa ya se cansó de tanto ir y venir. La relación le causa estrés, siente que su vida se vuelve caótica con la inestabilidad de Eleazar. Pero ella lo ama. Ama que vaya y que regrese. Ama que esté siempre tan dubitativo porque de lo contrario, ya hubiera terminado esa relación.
Ella no atina a comprender cómo es que su pareja, su gran amor, es realmente un polvorín de emociones. En realidad ni él mismo lo sabe. Y aunque se cansa de tanto esperar tranquilidad y armonía en su vida, se liga a un hombre que puede darle todo, menos una estabilidad tan anhelada.
Sueña con la posibilidad de que algún día, Eleazar entrará en tranquilidad. Será juicioso y responsable en sus relaciones. Eleazar, sin encambio, es un hombre que le teme al compromiso. En mi artículo: Los hombres y el miedo al compromiso puedes encontrar todos los detalles que tienen que ver con estas conductas inestables y hudizas para no sustentar una relación de pareja.
