La convivencia en las parejas se
encuentra sujeta a una serie de vaivenes en las que pueden tornarse tóxicas.
Algunos de los temas que pueden
enrarecer la vida en pareja son los siguientes:
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Celos enfermizos: no poder vivir sin estar controlando a la
pareja.
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Culpar
constantemente al otro y no asumir la responsabilidad en la relación.
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Conflictos permanentes y sin resolver:
discutir los mismos temas una y otra vez sin llegar a soluciones.
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Una comunicación
deteriorada y no tratar hablar de frente sino a través de indirectas. “Decir
sin decir”.
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El control:
tratar de querer saber todo sobre tu pareja. En este sentido las redes sociales
se han convertido en una trampa para la relación de pareja. Queremos saberlo
todo. Y cuando entramos a su vida social nos molestamos por lo que dicen, por
las fotos que suben y por las que no también.
La relación de pareja es ante todo un
proyecto para compartir, para crecer y para realizar una vida en común.
Las relaciones al tornarse tóxicas
desencadenan una serie de dependencias emocionales destructivas que se vuelven
un círculo vicioso.
En este sentido es necesario trabajar primero en nosotros
mismos, y luego, fortalecer la relación de pareja para salir de esos estados
tan destructivos.
En mi libro Cómo Vencer la Dependencia Emocional hablo justamente de esta manera de salir de
patrones destructivas, además en mis otros dos títulos exitosos te llevo de la
mano para que se pueda realizar un proyecto de vida tanto personal como en pareja.
La terapia de parejas siempre es una gran posibilidad para poder
enfrentar este tipo de situaciones destructivas y tóxicas.
También
en este sitio puedes encontrar temas diversos como son:
Ana Giorgana
Terapeuta de parejas y familia