Leonor llega a la terapia de pareja porque considera que ama a su
pareja pero no es feliz.
Leonor está sometida a una fuerte tensión
por querer lograr la felicidad en pareja.
Casi está obsesionada en registrar cada
uno de sus momentos y días en los cuáles no es feliz.
Ella misma se ha impuesto una forma de
medida muy alta para poder saber sí los momentos con su pareja son o no
felices. En todo momento se la pasa pasando lista a sus sentimientos e
insatisfacciones para ver sí en ese momento es feliz o no.
Leonor se siente llena de dudas y temor
porque no sabe por qué no logra alcanzar la plenitud de su vida y la felicidad
con su pareja.
Desea ardientemente alcanzar una plenitud total en su relación de
pareja.
No comprende por qué su pareja no le da lo que ella tanto
necesita:
-
Amor.
-
Atención.
-
Reconocimiento.
-
Sexualidad
Plena.
-
Ternura.
-
Aprecio.
-
Empatía
Pareciera que Leonor está llena de expectativas acerca de la relación de pareja.
Para ella, la pareja "debe ser" y cumplir ciertas reglas y conceptos; le cuesta trabajo vivir en el aquí y ahora con lo que tiene o puede construir en su relación de pareja.
En el momento en el que revisamos su historia en la terapia Leonor, logra darse cuenta que solo está pendiente de lo que su pareja hace o deja de hacer. Ella se ha perdido a sí misma, tratando de que su relación encaje en su idea acerca de la pareja.
Para ella, la pareja "debe ser" y cumplir ciertas reglas y conceptos; le cuesta trabajo vivir en el aquí y ahora con lo que tiene o puede construir en su relación de pareja.
En el momento en el que revisamos su historia en la terapia Leonor, logra darse cuenta que solo está pendiente de lo que su pareja hace o deja de hacer. Ella se ha perdido a sí misma, tratando de que su relación encaje en su idea acerca de la pareja.
Leonor no es capaz de verse a sí misma.
Vive solo para detectar que hace su pareja y cómo la deja mal
librada en su relación de pareja.
Está desolada, no se da cuenta que la felicidad es un estado de
ánimo que nos lleva a vivir la vida plenamente.
La felicidad no es una cuestión permanente en la vida de ninguna pareja, de ninguna persona.
La felicidad no es una cuestión permanente en la vida de ninguna pareja, de ninguna persona.
Existen momentos felices. Situaciones placenteras otras no tanto.
Momentos de preocupación, de atención de entrega, pero no todo en la historia
de las relaciones de pareja es la felicidad plena.
Leonor deposita toda su felicidad en la pareja. Ella no es capaz
de brindarse a sí misma momentos de felicidad y plenitud, por el contrario, se llena de rencor y odio por su propia insatisfacción personal.
El primer paso para empezar a trabajar con Leonor es lograr que ella se asuma como el centro de su propia felicidad y existencia.
El segundo es dejar de presionar y controlar a su pareja para que la haga feliz.
El segundo es dejar de presionar y controlar a su pareja para que la haga feliz.
El tercer aspecto es una revisión de su historia personal, no
existe otro camino, necesitamos recobrar conciencia de la manera en que hemos
vivido para superar algunas dificultades y sortear una vida más feliz.
El cuarto es que su vida es más grande que solo una relación de
pareja.
La pareja es importante, pero existen otras situaciones en su vida en las que ella tiene que responder y trabajar para sí misma, como son:
a) autonomía.
b) autovalor.
c) autoestima
d) autoconocimiento.
Y, sobre todo librar esta obsesión que la mantiene en una fuerte dependencia emocional hacia su pareja que no le permiten ser feliz.
La pareja es importante, pero existen otras situaciones en su vida en las que ella tiene que responder y trabajar para sí misma, como son:
a) autonomía.
b) autovalor.
c) autoestima
d) autoconocimiento.
Y, sobre todo librar esta obsesión que la mantiene en una fuerte dependencia emocional hacia su pareja que no le permiten ser feliz.
Iniciamos este trabajo a través del libro: Cómo Recuperar la Confianza en el amor: heridas y cicatrices en la relación de pareja.
Ana Giorgana
Especialista en Terapia de Pareja
Y Prevención Familiar y Social
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