El autor habla sobre los diferentes estragos que se encuentran en relación directa con la ira y la hostilidad, el resentimiento, la ansiedad e ira reprimida. Cada una de estas emociones se relacionan con enfermedades físicas y hace un extenso planteamiento acerca de su relación como son las siguientes:
La ira y la hostilidad se encuentran en relación directa con la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares.
El resentimiento se expresa mediante la amargura, el odio hacia sí mismo, desórdenes autoinmunes, como por ejemplo, el sida, esclerosis múltiple, artritis reumatoide y lupus, entre otras.
La ansiedad se manifiesta en perturbaciones que tienen que ver con el colon irritable, los ataques de pánico y palpitaciones cardíacas.
La ira reprimida tiene su expresión a través los dolores de cabeza, la tensión nerviosa, migrañas, dolor crónico de espalda, problemas en la articulación teporomaxilar y fibromialgia.
Colbert hace un recorrido y explicación acerca de cómo las emociones destructivas, mal manejadas, pueden llegar a ser "una bomba de tiempo" y su efecto nocivo y tóxico sobre el organismo repercuten sobre una precaria salud y enfermedades crónicas.
Es una fuente clara y concisa para quienes tienen algún padecimiento de esta naturaleza, y aunque, pone énfasis en el aspecto espiritual lo que hace de ella, una obra integral y holística para su mejor comprensión.
Es una realidad reconocida hoy en día que la gran mayoría de las enfermedades y padecimientos tienen una base emocional que impacta en la severidad de la misma calidad de vida física y emocional.
El estrés, la depresión, los dolores de cabeza, la hipertensión y tantas otras enfermedades crónicas están en relación directa con las fallas de los individuos para manejar su vida emocional, sus conflictos y problemas de orden afectivo.
Es importante tratar dichas emociones y contar con un tratamiento integral del padecimiento y por supuesto de la persona para así contar con una recuperación en todas las áreas de funcionamientos: personal, familiar, laboral, social y físico y espiritual.
www.cecreto.com
La ira y la hostilidad se encuentran en relación directa con la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares.
El resentimiento se expresa mediante la amargura, el odio hacia sí mismo, desórdenes autoinmunes, como por ejemplo, el sida, esclerosis múltiple, artritis reumatoide y lupus, entre otras.
La ansiedad se manifiesta en perturbaciones que tienen que ver con el colon irritable, los ataques de pánico y palpitaciones cardíacas.
La ira reprimida tiene su expresión a través los dolores de cabeza, la tensión nerviosa, migrañas, dolor crónico de espalda, problemas en la articulación teporomaxilar y fibromialgia.
Colbert hace un recorrido y explicación acerca de cómo las emociones destructivas, mal manejadas, pueden llegar a ser "una bomba de tiempo" y su efecto nocivo y tóxico sobre el organismo repercuten sobre una precaria salud y enfermedades crónicas.
Es una fuente clara y concisa para quienes tienen algún padecimiento de esta naturaleza, y aunque, pone énfasis en el aspecto espiritual lo que hace de ella, una obra integral y holística para su mejor comprensión.
Es una realidad reconocida hoy en día que la gran mayoría de las enfermedades y padecimientos tienen una base emocional que impacta en la severidad de la misma calidad de vida física y emocional.
El estrés, la depresión, los dolores de cabeza, la hipertensión y tantas otras enfermedades crónicas están en relación directa con las fallas de los individuos para manejar su vida emocional, sus conflictos y problemas de orden afectivo.
Es importante tratar dichas emociones y contar con un tratamiento integral del padecimiento y por supuesto de la persona para así contar con una recuperación en todas las áreas de funcionamientos: personal, familiar, laboral, social y físico y espiritual.
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